A veces la juventud te hace soñar, te eleva a lugares insospechados e incluso te ilusiona sin límites. Además parecen haber muchas oportunidades de progreso y tus ganas de trabajar crecen y crecen sin control.
De pronto, la temible realidad te azota contra el suelo y te sobaja, haciendo ver que eres solo un hombrecillo habitante del tercer mundo en donde las oportunidades son más bien carentes y los jóvenes faltos de oportunidades son abandonados a su suerte.
Aunado a eso, la fría realidad resta familiares, resta sonrisas y suma desencantos a tu alrededor, así es la vida y no se debe hacer nada para remediarlo, aunque eso signifique que deba aceptarlo como la pero de las noticias recibiendo una de las llamadas más horribles que jamás escuchare. Solo puedo decir adiós.
Ahora solo queda esperar un año más. Me queda la impotencia de haber tenido en mis manos tres cartas de aceptación y un cúmulo de sueños, una carrera prometedora y un currículum modesto pero contundente (a mi juicio), espero no sea una mera anécdota el haber ganado un lugar en una de las mejores Universidades del Mundo. Espero lograr ese sueño el próximo año.
Ahora debo vivir en mi sofocante realidad llena de plomo, en donde tengo que luchar por que no me roben en la calle, en donde reniego del costo de los litros de 900mL de gasolina y en donde conseguir un trabajo pobremente remunerado es mi única ilusión.
El siguiente año debe ser mejor, aprender del rechazo es lo único salvable y volver al desempleo es lo más preocupante.
Espero que un año vuelva a sentir ese mismo deseo de andar en bicicleta por calles frías, de cruzar el charco en avión, de partirme la espalda para conseguir mi sueño.
A esperar y no morir (literalmente) en el intento.
Estamos juntos en esto, tenemos que salir adelante, vienen tiempos mejores ...
ResponderEliminarPobre del que tiene miedo de correr riesgos. Porque ese quiza no se decepcione nunca, ni tenga desiluciones, ni sufra como los que persiguen un sueño.
Lo demas ya lo sabes
the difference between a loser and a fighter is the way they face the failures. a loser can not see the reasons for his failure or he feels he does not have the capacity. on the contrary a fighter can identify the reasons for his failure and will work out new ways to succeed. i am for the firm belief u r a fighter.
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