Cucciardi, Vries, Boheringer, Handal, Estens, Fischer... son algúnos de los apellidos que colman las listas del colegio. Como es obvio, muchos de esas familias tienen raíces extranjeras y aunque me culpen de xenofobía a mi no me gusta en lo más mínimo que las personas que tienen relativamente poco tiempo pisando estos suelos, vivan mejor que los que siempre han estado aquí y que por herencia de La Malinche, viven o más bien sobreviven pidiendo limosna y viviendo en la marginación. Creo que eso no es correcto, no lo es.
Es algo aprecido al síndrome Jacinta, en donde se enjuicio y sobajó gravemente la persona de una indígena otomí que por no saber español la metieron a la carcél sin entender una sola palabra de lo que se habló en su juicio. Su pena: tres años en el botellón por haber secuestrado a policias Federales, su delito haber nacido otomí.
se van a enojar tus jefes ehh !
ResponderEliminarcuidadito muchachito CHAVARRIA!
no vaya a ser que te la dejen cai