Luego de un final de semestre de alarido, en el que soñaba con el GPA de 4.0 y obtener de una ves por todas la calificación académica que nunca obtuve en el pasado, el resultado de un número que no diera lugar a dudas y la contundencia que jamás logré... simplemente valieron queso. El perro Bermudez se habría regodeado con mi clase de current concepts y es que la tuve era mía y la deje ir. En mi defensa debo decir (no a manera de excusa) que varios de los doctores invitados hicieron lo que quisieron. Que si no sabía que calificar ni el valor máximo de sus tareas, que si encarga un trabajo express con forma de trabajo final y con valor de chinga tu madre, que si se le olvida hasta cuando dar clase, en fin. No es sorpresa que con unos de los docentes más rudos del departamento obtuve casi todos los puntos posibles, la razón: él sí organizó sus clases!!!
Pero bueno, es solo una calificación.
Luego me tomé un pequeño paseo en el que, me llevé una grata sorpresa con al conocer a unos extraños. El señor de la casa resultó haber estudiado en la misma escuela que su servilleta (fue parte de la primera generación), la señora escribió un libro que habla de la ciudad donde nací y crecí, su familia compartió parte de su vida (por algunos días) con nosotros recordandome lo que es un familia mexicana, disfrutando de hablar español con alguien diferente, platicando acerca de situaciones que a todos nos eran familiares, riendo de anécdotas de laguneros exiliados (a cañón se oye muy feo, 'que viven fuera' digamos) que solo nosotros comprendíamos. Me recordaron lo que es una comida de señora, con ese sabor especial. Además evitó que pasara la navidad jugando God of War II y que mi cena fuera una pizza de Little Caesar, que aunque muy buenas y baratas hubiera sido la peor cena de navidad de mi vida.
La chikis no esta y la soledad rinde frutos. He estado pensando sobre muchas cosas; que si el casamiento aunque cueste mucho dinero, que si el dinero aunque cueste mucho trabajo, que si el trabajo de Huber aunque cueste mucho sacrificio. He puesto en duda la recomendación de un muy buen amigo mío; a mi no me gusta EU, son un anti-gringo natural pero por otro lado es el país que me ha dado la oportunidad; me gustaría estudiar y vivir en un país en donde cultura no signifique comer comida rápida y gastar energía al por mayor. Al mismo tiempo mi mente y mi edad me dicen que no vaya tan lejos de México aunque mi tímido espíritu aventurero dude por conocer el otro lado del charco. Quiero disfrutar el lugar en donde estudie y viva, no quiero irme solo a estudiar y empezar una carrera mientras mi cabeza siga imaginando el sueño original.
Al final no sé que esperar, si un indio acaba en México o EU; un mexicano en EU, Alemania o Bélgica; donde iré a dar yo... no lo sé, el camino es muy diverso y espero el destino me tenga un lugar especial. Ya dije.
